Congelar borraja: paso a paso
Si tienes en tu huerta cultivo de borraja, llegado el momento puedes cosechar y congelar en el caso de que no la consumas a la brevedad. En el caso de que la consigas en el mercado, deberás tener en cuenta que el aspecto tiene que ser fresco y suave al tacto.
Si decides congelar la borraja, lo puedes hacer en bolsas aptas para tal fin, pero tienes que saber que luego no la vas a poder emplear para guarniciones (si lo haces antes de que estén congeladas). Paso a paso:
- Lavar con abundante agua fría la borraja y estrujar para retirar el exceso de agua. Dejar reposar por unos minutos hasta que se seque por completo.
- En una bandeja, esparce toda la borraja. Colocar en el congelador hasta que estén quebradizas al tacto.
- Una vez que las hojas de borraja estén congeladas, guardarlas en una bolsa apta para congelador. Volver a congelar.
Así de sencillo es congelar la borraja. Para utilizarlas, saca solamente las hojas que vayas a consumir, solo lleva unos minutos el proceso. Deberás tener en cuenta que estas hojas descongeladas no se pueden volver a congelar.
¿Cómo consumir la borraja luego de haberla congelado?
La realidad es que se puede consumir de muchas formas, la más común es agregarla cruda en ensaladas. Otra alternativa es hervida, aquí tienes que tener en cuenta de no pasarte con la cocción para que no pierda las propiedades nutritivas. En este caso, retirarla del congelador y agregarla inmediatamente a una olla con agua al fuego.
Además, la borraja se puede consumir como infusión, pero para ello vas a necesitar las flores de la planta. Por último, con las semillas de borraja, se elabora aceite y se usa con fines medicinales.
