Características de la hoja de ajonjolí
Las hojas de la planta de ajonjolí son muy variables y brotan en pares y opuestas. Este último nace con un ángulo de 90 grados. El tamaño de largo de las mismas varía entre 3 a 7 cm y el ancho entre 1 a 5 cm.
En líneas generales, el tamaño de todas es mediano y poseen un color verde intenso. Su textura es aterciopelada y su sabor en el paladar es fresco. En el párrafo siguiente, te contamos cómo puedes usar las hojas de ajonjolí.
Usos de la hoja de ajonjolí
En la actualidad, las hojas de sésamo se consumen frescas y también congeladas, más precisamente en Corea. En la gastronomía de este país, la planta de ajonjolí se usa cruda para envolver diferentes tipos de carne, como por ejemplo la de perro. De hecho, los expertos en el tema aseguran que esta hoja, suaviza mucho el sabor de la carne canina.
Las hojas de ajonjolí se caracterizan por aportar un sabor fresco, una mezcla de menta, hinojo y manzana. El color verde intenso las caracteriza tanto. El sabor que aportan es tan sutil que pueden ser empleadas en la mayoría de las preparaciones culinarias, hasta en un postre. En la parte exterior de la hoja se pueden ver delicadas vellosidades, esto también aporta un “extra” al paladar.
Es importante mencionar, que no solo Corea utiliza estas hojas para su consumo, sino también naciones del Lejano Oriente. En tanto en Nepal y en la India la consumen como dips y en salsas. En Japón, emplean las dos variedades de hojas: verde y con matices morados para acompañar sashimis y para arriba de la pizza.
En cambio, en China se usa como una planta medicinal, para la piel, la vista. Además, benefician a que los intestinos funcionen correctamente y al sistema inmunológico. Como si fuese poco, las hojas de ajonjolí son anticancerígenas, antirreumáticas y bactericidas.
