¿Qué necesita una parra de uva para crecer?
- Temperatura: Entre 9 y 18°C (Con algunas excepciones).
- Luz: Al menos 6 a 8 horas de sol directo.
- Suelo: Ligero y con materia orgánica.
- Riego: Constante, sin encharcar ni salpicar.
- Abono: Líquido y anual al final del invierno.
- Podas: Anuales al final del invierno y cada que existan partes dañadas o marchitas.
¿Cuáles son los aspectos más importantes a tener en cuenta con la vid?
La parra de uva necesita mantenerse asoleada, aireada y seca. Los lugares que más benefician a su crecimiento son espacios templados que no cuenten con excesos continuos de humedad en el ambiente. Además tanto el suelo como la maceta requieren de buen drenaje para evitar el estancamiento del agua.
¿Qué causa el exceso de humedad en la parra?
- Los lugares con alta humedad ambiental son más propicios a generar una enfermedad causada por hongos en las uvas. Es por esto que las podas de la parra son tan importantes, ellas mantienen a la planta aireada y fresca para prevenir la aparición de dichos hongos.
¿Cómo mantener sana la parra?
Suelo
El sustrato necesita ser suave. Las mezclas de tierra compactas no son tan beneficiosas para la parra como los sustratos ligeros con turba y materia orgánica.
Riego
Además de las podas, el riego es un factor importante. Procura regar cada que el sustrato se encuentre seco al sumergir el pulgar. Riega de forma que las hojas no se mojen o salpiquen.
Fertilizante
El abono en exceso puede dañar a la planta en vez de beneficiarla. Si el suelo se ha abonado correctamente antes de la plantación no hará falta abonar seguido. Un abono anual después de la poda a finales de invierno suele ser suficiente.
¿Qué enfermedades tienen las parras?
- Las enfermedades más comunes en la parra de uva son causadas por hongos. Puedes prevenirles añadiendo también un fertilizante y fungicida casero en épocas lluviosas o en cambios drásticos de temperatura.