Enfermedades de los cerezos

La mayoría de las enfermedades del cerezo son enfermedades causadas por hongos. Por eso es muy importante la selección de especies resistentes. Los árboles infectados se combaten de forma eficaz con cortes y fumigaciones adecuadas. La invasión de plagas puede frenarse con otros agentes como insectos, pájaros.

enfermedades-del-cerezo
La cockcomicosis es una enfermedad muy grave.
  • Enfermedades: cácner, enfermedad de la valsa, monilia, cockcomicosis, enfermedad de la escopeta

Las enfermedades más comunes

El cáncer de los árboles

El cáncer de los árboles frutales es una enfermedad causada por un hongo que ataca la madera y la corteza. Las zonas afectadas se decoloran, la corteza se seca y se agrieta, y con el tiempo se produce un engrosamiento en las zonas afectadas. Para prevenirlo, es importante cuidar bien las heridas y evitar que se dañe la corteza. La principal forma de controlarlo es eliminando las zonas infestadas.

Enfermedad de la valsa

La enfermedad de la valsa está causada por un hongo patógeno que se propaga en las heridas de la corteza. La superficie de la corteza desarrolla verrugas, se decolora y se hunde, las hojas se vuelven amarillas y mueren, al igual que los frutos. El daño también se caracteriza por el escurrimiento de resinas. La enfermedad de la valsa puede prevenirse si escoges un lugar adecuado para el árbol. Para controlar la enfermedad, hay que cortar las zonas afectadas.

Datos curiosos

Los cerezos bien cuidados son más resistentes a las plagas y enfermedades que los que se encuentran en una ubicación desfavorable y reciben cuidados insuficientes. La elección cuidadosa de la ubicación y la variedad, así como las medidas de protección, previenen las enfermedades.

Monilia

La Monilia se manifiesta cuando las puntas de las ramas se secan o los frutos se pudren. En el primer caso, las flores de las puntas de las ramas se marchitan, y luego las ramas afectadas mueren. También puede afectar los frutos haciendo que se pudran, pero después siguen formando otro fruto. Lo más característico de esta enfermedad es que las manchas secas y las frutas se quedan pegadas a la rama. Las partes afectadas se deben de quitar lo antes posible. Las ramas muertas pueden contagiar toda la planta.

Cockcomicosis

Esta enfermedad causada por un hongo se puede expandir mucho en climas húmedos y cálidos. Cerezos afectados empiezan a perder hojas hasta quedar completamente calvos. Los frutos se quedan sin carne y se pierden cosechas enteras. Si eso sucede ya es demasiado tarde para actuar. Para evitar que el hongo se quede en el suelo o en la planta hay que:

  • Juntar todas las hojas y quemarlos y tirarlas a la basura en una bolsa cerrada.
  • Quitar la mala hierba abajo del cerezo y aflojar la tierra.
  • Podar el cerezo en primavera.

Para prevenir la enfermedad puedes comprar una variedad de cerezo resistente a la cockcomicosis.

Enfermedad de la escopeta

La enfermedad de la escopeta (hoyos en las hojas) es una enfermedad que comienza con la aparición de manchas rojizas en las hojas, que poco a poco se van oscureciendo y más tarde se convierten en agujeros. Parece que las hojas recibieron un disparo. Si la enfermedad es muy grave, el árbol puede perder las hojas antes de tiempo. Si los frutos están afectados también, se paralizan y mueren. El tratamiento de la enfermedad se tiene que hacer antes de la floración. Los brotes que están afectados se recortan por completo.

Plagas

  • Gusanos: las orugas de la mariposa (Operophtera brumata) se comen las hojas tiernas y las flores.
  • Mosca del cerezo (Rhagoletis cerasi): atacan las cerezas dulces en particular.
  • Pulgón de la cereza negra (Myzus cerasi Fabricius): ataca las puntas de los tallos de los cerezos dulces y amargos; Impide que crezcan los árboles jóvenes, sólo sirve fumigar a tiempo.

Datos curiosos

Los pájaros son útiles porque ayudan a controlar las plagas. Sin embargo, también les gusta comer los frutos. Para que los daños no sean mayores que los beneficios, hay que proteger la parte superior de la planta con una red de malla cuando los frutos maduren.

Texto: Renata Roqueñi