¿Cómo cuidar el bonsái ficus ginseng correctamente?

No se puede decir que el ficus ginseng sea muy fácil de cuidar, pero si se vigila y se siguen algunas reglas básicas, se puede disfrutar de esta planta de interior de aspecto exótico durante mucho tiempo. Aquí te contamos todos los cuidados que necesita.

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Un bonsái ficus gingseng necesita bastantes cuidados

¿Qué cuidados requiere el ficus ginseng?

Ubicación y suelo

Para prosperar, el ficus ginseng necesita un lugar luminoso sin luz solar directa. Hay que evitar a toda costa las corrientes de aire, así como un sustrato frío o un aire de calefacción excesivamente seco. Al ficus ginseng no le gustan las grandes fluctuaciones de temperatura, pero puede pasar el verano en el exterior en un lugar de semi-sombra.

  • Lo ideal es que el suelo sea más bien grueso y esté bien drenado. Si vas a cultivar tu ficus ginseng como bonsái, puede utilizar tierra especial para bonsái. Una mezcla de arena, arcilla y tierra también es adecuada y mucho más barata. Como planta de interior, el ficus ginseng también prospera bien en tierra de maceta estándar.

Maceta con buen drenaje

Al plantar y trasplantar, asegúrate de que hay un agujero de drenaje en la maceta y coloca una capa de drenaje en el fondo. Basta con colocar unos cuantos guijarros grandes o dos trozos de arcilla sobre el orificio de drenaje para que no quede obstruido por la tierra.

¿Cada cuánto trasplantar?

Debes trasplantar un ficus ginseng cada dos o tres años aproximadamente. En el caso de los bonsáis, aprovecha para podar la raíz al mismo tiempo. Si la maceta de la planta de interior sigue lo suficientemente grande, basta con cambiar la tierra de la maceta.

Riego y abono del bonsái

El ficus ginseng debe regarse según cuando sea necesario, es decir, cuando la capa superior del suelo se haya secado. En verano puede ser cada dos días, en invierno suele ser mucho menos frecuente. El agua de lluvia o el agua de filtro es mejor que el agua del grifo (ya que esta contiene un alto contenido en cal).

  • Desde abril hasta finales de agosto o principios de septiembre, abona tu ficus ginseng cada 14 días aproximadamente con un abono líquido comercial. Como alternativa, también puedes utilizar abono de liberación lenta. No es necesario un abono especial, ni siquiera un abono para bonsáis.

El ficus ginseng en invierno

El ficus ginseng no es resistente al frío nocturno del exterior. En zonas frías, mantén tu planta a temperatura ambiente en el interior del hogar, a no menos de 12 °C. Como planta de hoja perenne, también necesita mucha luz en invierno.

Poda del ficus ginseng

La poda regular no es necesaria para el ficus ginseng como planta de interior. Sin embargo, la versión bonsái debe podarse continuamente para mantener la forma y tamaño deseados.

Los hechos más importantes en resumen:

  • Posición: luminosa, sin luz solar directa ni corrientes de aire.
  • Temperaturas: entre 18 °C y 22 °C
  • Suelo: grueso y bien drenado (tierra de bonsái o mezcla de tierra y arena)
  • Regar y abonar: según sea necesario
  • No tolera mucho la cal: utiliza agua de lluvia
  • La poda regular: sólo es necesaria para los bonsáis
Texto: Tomas Andrés