- Plagas rizófagas (atacan a la raíz): gusano de alambre, gallina ciega, diabrótica.
- Plagas del follaje y mazorca: trips, pulgones, gusano cogollero o gusano del maíz, gusano soldado, gusano elotero, araña roja, chapulines.
Plagas rizófagas del maíz
Se llama plagas rizófagas a aquellas que atacan a la raíz de los cultivos, en este caso, del maíz. Si bien no son numerosas las especies que afectan a las raíces, su acción es sumamente dañina para las plantas, ya que pueden privarla de hidratación y nutrientes, e incluso provocar su muerte. Te contamos más sobre estas plagas para que tus maíces puedan desarrollarse saludablemente y dar frutos.
Gusano de alambre en maíz
También llamados doradillos o alfilerillos, son las larvas de pequeños escarabajos de 1 cm en su estado adulto. Las hembras ponen entre 100 y 200 huevos sobre la tierra húmeda y rica en materia orgánica. Tras un mes y medio de incubación, las larvas (gusano amarillo y duro) emergen y atacan a las semillas o raíces de las plántulas de maíz. Los síntomas de su presencia son:
- Ataque a las semillas, que dificultan el nacimiento de la plántula o lo evitan por completo.
- Heridas transversales en la parte enterrada del cuello de la planta de maíz, que pueden producir el ahijamiento de la planta e incluso su muerte.
- Marchitez del cogollo terminal, también conocido como hoja central. Las demás hojas permanecen intactas.
- Las plántulas de entre dos y tres hojas se marchitan.
- Desaparición completa de plantas que tienen 4 hojas o más.
Una vez que la plaga se ha instalado, resulta muy difícil de erradicar, en tanto no se conocen medidas curativas eficaces. Por eso, es muy importante tomar algunas precauciones para evitar el ataque de los gusanos de alambre:
- Utilizar abono para fortalecer a plántulas y favorecer el nacimiento de la semilla.
- Eliminación de material vegetal que pudiera quedar en el suelo.
- Riego justo, ya que el exceso favorece la aparición de la plaga, y la sequía hace que los gusanos bajen a mayor profundidad, además de debilitar las plántulas de maíz.
- Aplicación de insecticidas a modo preventivo, tanto a la semilla como al suelo. Puedes usar aceite de neem, insecticida a base de jabón potásico, o insecticida apichi.
Los gusanos de alambre en maíz se alimentan de la raíz del maíz
Gallina ciega en maíz
Se conoce con este nombre a la larva de un escarabajo color pardo rojizo. Estas larvas pueden ser de distintas especies, y la longitud aproximada que alcanzan es de 2,5 cm. Son de color blanco cremoso, con abdomen y tórax arrugado, tres pares de patas cortas y cabeza marrón rojizo, de donde emergen mandíbulas pronunciadas. Resultan sumamente peligrosas en ataques severos, por la voracidad con que atacan el sistema de raíces del maíz. Los principales síntomas de su presencia, provocados por el deterioro de las raíces al ser comidas por las larvas, son:
- Marchitez o amarillamiento de hojas.
- Mal desarrollo general de la planta por falta de nutrientes y deshidratación.
- Acame, una vez que las raíces no pueden sostener a la planta.
La gallina ciega daña la raíz del maíz
En general, la presencia de estos gusanos es detectada una vez que la plaga ha avanzado, por lo cual es muy importante tomar algunas medidas preventivas:
- Colocación de trampas de luz para atrapar a los escarabajos adultos y evitar la oviposición: se trata de lámparas encendidas entre las 8 y las 10 de la noche, que atraen a los adultos, desviando la atención de los cultivos. Esta trampa puede combinarse con trampas de agua.
- Trampas de agua: mezclar levadura, plátano macerado y detergente y colocar en un recipiente alrededor de los maíces y de las trampas de luz.
- Voltear el suelo luego de la cosecha o en otoño, para que las larvas queden expuestas al sol y a depredadores naturales.
- Abonar el suelo para favorecer el desarrollo de microorganismos, entre los que pueden encontrarse depredadores de estos gusanos.
Plagas del follaje y mazorca del maíz
Las plagas que atacan a las hojas, brotes y mazorca pueden generar pérdidas en la cosecha al disminuir la superficie fotosintética de las plantas de maíz. Su acción puede no ser tan feroz como en el caso de las plagas rizófagas, sino que pueden presentarse de forma progresiva, aunque su accionar puede ser igualmente letal en caso de avanzar el ataque. Te contamos sobre algunas de las plagas de follaje en maíz.
Gusano cogollero en maíz
También conocido como gusano del maíz u oruga militar tardía, pertenece a la especie Spodoptera frugiperda, y es la larva de una polilla pardo grisácea. Las hembras colocan los huevos en el envés de las hojas, contando con 300 o más en cada postura, y los recubre con una capa pilosa. Al surgir, las larvas se comen entre sí, quedando entre dos y tres por planta. Hacia la fase final del estado larval, pueden medir entre 30 y 45 mm, y presentan colores verdes, gris oscuro o rosado amarillento.
Los principales síntomas de su presencia son:
- Daño de primer grado: roído foliar o aparición de ventanitas traslúcidas en las hojas. En este momento es importante el monitoreo, ya que las larvas están expuestas y pueden quitarse manualmente.
- Daño de segundo grado: perforaciones en la superficie foliar.
- Daño grado 3: en esta etapa, el ataque es severo e irreversible. Las larvas, casi en su estadio final, se alimentan de la totalidad de la hoja y el cogollo, produciendo una perforación en el cogollo, cuya abertura es cubierta por el característico “aserrín” (excremento).
Para evitar la aparición y avance de esta plaga es muy importante el monitoreo periódico de las plantas de maíz, a los fines de detectar al gusano cuando aún es visible. También puedes remover malezas y remover el suelo. La aplicación de insecticidas naturales (aceite de neem, jabón potásico, insecticida apichi) sólo será eficaz en tanto las larvas estén expuestas, es decir, en los momentos en que provocan daños de primer y segundo grado. En la tercera etapa del ataque, será necesario quitar la planta.
Algunos gusanos prefieren comer las hojas del maíz
Gusano elotero en maíz
Esta plaga también es conocida como gusano de cápsula, pertenece a la especie Helicoverpa zea, y es una de las principales amenazas del cultivo de maíz. Los gusanos pueden ser de diversos colores: verdosos, gris oscuro, amarillentos. Sus cuerpos muestran una banda de color blanquecino de 2 a 3 mm. de ancho.
Durante su estado larval se alimenta de la seda de la mazorca y los granos en formación, por lo cual las pérdidas son importantes. Los principales síntomas de su presencia son:
- Aparición de numerosa cantidad de huevos en los estigmas del maíz.
- Verás gusanos, primero en el follaje, luego en las mazorcas en sus primeros estadios de desarrollo.
- Desaparición de pelos y granos de la mazorca.
- Perforaciones en hojas y mazorca.
- Acumulación de excrementos, que favorece la aparición de hongos y pudrición de la mazorca.
Los gusanos eloteros se comen las mazorcas
Para evitar que la plaga se asiente en tus cultivos, puedes emplear trampas de luz (igual que para la gallina ciega) y trampas de feromonas. También es importante que respetes el calendario de siembra, y que apliques insecticidas naturales a modo preventivo (aceite de neem, jabón potásico e insecticida apichi). Estos insecticidas pueden ser útiles para el combate de la plaga en estado de huevo o en los primeros estadios larvarios, ya que una vez que la larva comience a perforar la mazorca su erradicación se torna muy difícil.
Preguntas frecuentes
¿Qué plagas puede tener el maíz?
El maíz puede ser atacado por gran variedad de plagas. Se pueden diferenciar entre aquellas que se alimentan de la raíz de la planta, y las que se alimentan del follaje y mazorca. En el primer grupo encontramos al gusano del alambre, gallina ciega y diabrótica, mientras que en el segundo grupo se hallan el gusano cogollero, trips, gusano elotero, entre otras.
¿Qué es bueno para las plagas del maíz?
Para combatir las plagas del maíz es importante el monitoreo periódico, ya que te ayudará a detectar el ataque en los primeros estadios y controlarlo rápidamente. La técnica de barbecho profundo ayuda a controlar a los gusanos, ya que los deja expuestos al sol y los depredadores. También puedes emplear insecticidas naturales como aceite de neem, jabón potásico e insecticida apichi.
¿Cuáles son los diferentes tipos de plagas?
Existen distintas formas de clasificarlas, ya sea por el tipo de insecto del que se trate (gusanos, ácaros -entre los que se encuentran la araña roja-, lepidópteras, entre otras) o por la parte de la planta de la que se alimente (rizófagas, de follaje y mazorca).
