Cómo reconocer una yaca madura
Para saber si una yaca está lista para comer, debes reparar en su color y tamaño, aunque no todas alcanzan el mismo tamaño o peso. Si está madura, su cáscara será de color amarillo, nudosa y un poco más suave que cuando está verde.
La yaca madura es ideal para comer como fruta, preparar aguas frescas, licuados o postres. Tiene un sabor bien dulce, al igual que otras frutas tropicales como el plátano, la piña o el mango. En cambio, la fruta verde es más adecuada para preparar comidas saladas o conservas y no tiene casi sabor.
Cómo pelar la yaca
Una vez que has elegido una yaca madura o verde, debes saber cómo pelarla y separar los gajos y las semillas de la parte central que no es comestible. Vas a notar que el cuchillo se ensucia demasiado, debido a que la yaca tiene una savia muy pegajosa en su interior.
Para evitar que se pegotee todo, sigue los siguientes pasos:
- Colócate un poco de aceite en las manos antes de empezar.
- Corta la yaca por la mitad de forma longitudinal usando un chuchillo para carnes bien afilado.
- Retira la franja blanca y ancha que se encuentra en el centro de la fruta, usando el cuchillo.
- Extrae las semillas y resérvalas, porque son muy nutritivas.
- Saca uno a uno los gajos o bulbos, retirando la parte blanca o hueso.
Recuerda que al ser una fruta grande, puedes hacer muchas comidas con una sola fruta. Por eso lo mejor es que guardes la fruta que no comerás en el refrigerador o bien, que la congeles, para poder consumirla en otro momento.
Consumirla es muy beneficioso para la salud, ya que tiene propiedades antioxidantes, digestivas, antidiabéticas y ayuda a regular la presión arterial, entre muchos otros beneficios. Pero no solo la pulpa de yaca es beneficiosa para la salud, sino también sus semillas y hojas.
Cómo utilizar la yaca en la cocina
La siguientes son algunas de las comidas que puedes elaborar con la yaca, para que amplíes tu recetario y puedas disfrutar de este exótico manjar, con el que puedes preparar desde un jugo hasta una afrodisíaca comida gourmet:
- Con la pulpa de la yaca puedes hacer licuados, aguas frescas, mermeladas o postres;
- A las semillas puedes comerlas tostadas, horneadas o hervidas, y sumarlas a tus comidas como cualquier fruto seco.
- Con las semillas puedes hacer harina de yaca y mezclarla con otras harinas para elaborar postres, pies o tortas.
- La pulpa de yaca es riquísima también en ensaladas dulces o saladas.
- Con la pulpa de yaca verde puedes reemplazar la carne para elaborar salteados o rellenos.
La yaca como sustituto de la carne
Debido a su textura fibrosa y a que no tiene casi sabor, la yaca verde, cosechada antes de que madure, puede utilizarse como reemplazo de la carne para elaborar tacos, salteados, emparedados o quesadillas. Por sus características, muchas personas comparan la yaca con la carne de cerdo desmenuzada.
Es por eso que esta fruta es muy apreciada por veganos y vegetarianos, quienes siempre buscan opciones novedosas en el reino vegetal que no echan nada en falta a la carne animal.