Cómo preparar semillas de yaca hervidas
Una de las formas más usuales de comer semillas de yaca es hirviéndolas, porque así resulta más fácil su digestión. Luego de pelar la yaca, realiza el siguiente procedimiento para hervirlas, utilizando la cantidad de semillas que desees:
- Lava las semillas y escúrrelas bien en una servilleta de papel.
- Colócalas en una olla con un litro de agua o más, a fuego medio.
- Cuando rompa el hervor, hiérvelas durante 15-20 minutos.
- Al cabo de ese tiempo, retira la olla del fuego y cuela la preparación. Las semillas deben estar suaves.
- Una vez que estén frías, retira la capa blanca que las cubre.
- Ya puedes comerlas, ¡son muy deliciosas!
Semillas de yaca tostadas
Otra forma muy común de comer las semillas de yaca es tostándolas, lo que puedes hacer de manera muy sencilla siguiendo los siguientes pasos:
- Lava las semillas en agua tibia.
- Coloca un poco de aceite en una sartén, para evitar que las semillas se quemen.
- Cocina durante 10 minutos a fuego moderado, agitando la sartén de a ratos para que se tuesten de ambos lados. Al tostarse, notarás que se desprende fácilmente la capa que las cubre.
Las semillas de yaca tostadas tienen un sabor dulce, suave y cremoso. Y si las tuestas un poco más, tendrán un sabor parecido a las castañas.
Cómo hacer harina con semillas de yaca
Si tienes una buena cantidad de semillas, puedes molerlas e integrarlas en postres, budines, tortas, etc. Lo usual es mezclar la harina de yaca con harina de trigo o maíz. La harina de yaca le otorgará una textura más cremosa y un sabor suave y dulce a tus preparaciones.
La forma de hacer harina de yaca en casa es la siguiente:
- Lava las semillas en agua tibia.
- Hiérvelas durante 5 minutos, a fuego moderado.
- Cuélalas y déjalas enfriar.
- Quítales la primer capa que las cubre.
- Corta las semillas en trozos.
- Procesa los trozos de semillas hasta que se conviertan en polvo.
Como has podido ver, hay muchas formas de comer las semillas de yaca e incorporar todos sus beneficios a tu dieta diaria. Además, si cultivas yaca en casa, también podrás prepararte un relajante té de hojas de yaca, que te aportará muchas propiedades medicinales.