Cuidados de la Strelitzia nicolai

La Strelitzia nicolai tiene un aspecto tropical. Destacan sus hojas parecidas a las del plátano, su notable altura de hasta 12 metros y sus inusuales flores que se asemejan a las cabezas de las aves del paraíso. ¿Cómo debe cuidarse esta planta?

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La Strelitzia nicolai no necesita de muchos cuidados

¿Es mejor mantener la tierra húmeda o seca?

El sustrato debe mantenerse uniformemente húmedo. En ningún caso debe haber humedad estancada o sequedad prolongada. Por lo tanto, es esencial regar regularmente con agua tibia y de preferencia sin cal. Riega siempre cuando la capa superior del suelo se haya secado.

¿Cuáles son las necesidades de nutrientes?

Como las necesidades de nutrientes de la Strelitzia nicolai son de bajas a moderadas, no es necesario recurrir a los fertilizantes cada semana. Basta con abonar esta planta tropical cada 2 ó 3 semanas en temporadas cálidas. Si la Strelitzia nicolai pasa el invierno en un lugar cálido, se puede abonar una vez al mes durante el invierno. Utiliza un abono líquido convencional para plantas tropicales. No es aconsejable un abono de liberación lenta.

¿Qué debo tener en cuenta al podar?

Esta strelitzia no debe ser podada. Sólo deben retirarse las hojas viejas que se hayan vuelto marrones y estén completamente secas. Para ello, utiliza las manos y no las tijeras. Se arrancan las hojas para que no queden muñones. Las hojas nuevas vuelven a ser empujadas.

¿Qué enfermedades y plagas pueden aparecer?

La podredumbre de las raíces, una enfermedad, puede producirse si la zona de las raíces permanece húmeda. En este caso, es necesario actuar rápidamente en forma de trasplante. En cuanto a las plagas, las cochinillas y los pulgones pueden atacar a esta strelitzia, especialmente en invierno.

¿Cuándo es necesario un trasplante?

Toma en cuenta los siguientes consejos:

  • Trasplantar cuando las raíces sobresalgan por la parte inferior
  • Momento ideal: principios de la primavera
  • La nueva maceta debe ser ligeramente más grande que la anterior.
  • Eliminar la tierra vieja
  • Utilizar abono fresco para macetas
  • Añadir un poco de arena y grava (para un mejor drenaje).
Texto: Tomas Andrés