El injerto de manzana y durazno

El injerto de manzana y durazno suele realizarse para obtener cosechas más abundantes o mejorar la calidad de las frutas en general. La técnica de injertar frutales es más sencilla de lo que parece y puedes realizarla en tu propio jardín sin problemas.

injerto-de-manzana-y-durazno
Los injertos se hacen para mejorar las características de una variedad frutal

¿Por qué se realiza un injerto?

Las especies frutales se injertan generalmente para mejorar las características de una variedad frutal que tenemos sembrada. Puede ser que no de la cantidad de frutos que deseamos o que, sencillamente, hayamos encontrado una variedad de manzano o durazno que nos ha gustado, y queremos cosechar esa variedad en nuestro árbol.
Al sembrar árboles desde semilla, no siempre obtenemos una planta igual que la planta madre. Por lo tanto, el método para obtener un planta igual que la planta madre es el injerto.

Cómo realizar un injerto de manzano y durazno

Lo primero que tienes que saber es que siempre es mejor injertar árboles de la misma especie, es decir, durazneros con durazneros y manzanos con manzanos. También puedes injertar especies compatibles entre sí:

  • Durazno: es compatible con la cereza, el almendro, la nectarina, el albaricoquero y el damasco.
  • Manzano: solo puede injertarse con otro manzano.

Una vez que hayas elegido la especie con las características deseadas y el porta injerto o árbol patrón (el árbol que recibirá el injerto) ya puedes realizar el procedimiento. Ten en cuenta que el árbol patrón debe tener al menos 2 años de edad.

Procedimiento para injertar manzano y melocotonero

El procedimiento para injertar durazno y manzano es el siguiente:

  1. Corta una rama de unos 20 cm no tan gruesa pero que se vea fuerte.
  2. Quítale las hojas y botones florales.
  3. En el extremo inferior, realiza un corte en forma de cuña usando un cuchillo o cúter.
  4. En el árbol patrón, elige una rama más gruesa que el injerto y corta de manera horizontal el extremo de la rama. Luego, hazle una ranura longitudinal de unos dos centímetros.
  5. Inserta el injerto en esa ranura asegurándolo bien.
  6. Asegura la unión con cinta adhesiva o cinta plástica.

El injerto puede demorar unos 30 días en brotar. Durante ese tiempo, debes cuidar que reciba sol directo. Apenas veas que asoma un brote, debes retirar la cinta y, a partir de ese momento, prodigarle los mismos cuidados que necesita cualquier duraznero o manzano.

Texto: Lorena Morales