Enfermedad | Síntomas | Remedio |
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Podredumbre húmeda del tallo (Sclerotinia sclerotiorum) | Pudrición en el tallo del girasol, moho gris. | Evita el riego excesivo. |
Phomopsis o Chancro del tallo | Marchitamiento desde el tallo hacia toda la planta. Hojas amarillas. | Control de malezas |
Verticilosis (Verticillium dahliae) | Marchitamiento, color amarillo en el nervio de la hoja, y negro en el resto de la hoja | Retiro de la planta. |
El girasol es una planta muy resistente, sin embargo, puede sufrir el ataque de hongos, generalmente a causa de la humedad excesiva.
Podredumbre del tallo
La podredumbre del tallo es producida por los esclerocios que se encuentran sobre el suelo o enterrados en él, que germinan con temperaturas de 5 grados en adelante y con humedad alta. Es importante no excederse en el riego, ya que la humedad es el factor principal que desencadena esta enfermedad.
Phomopsis o Chancro del tallo
El Phomopsis o Chancro del tallo es una enfermedad que comienza desde la raíz de la planta, y que luego sube al tallo, donde puede verse un color negro entre el tallo principal y sus ramificaciones. Luego continúa avanzando hasta llegar a las hojas.
Cuando el hongo llega a las hojas del girasol, la enfermedad está avanzada. Para prevenir su aparición, es necesario hacer un control de plagas regular.
Verticillium del girasol
La enfermedad de Verticillium no tiene un tratamiento efectivo, por eso una vez que la detectas deberás pensar en evitar su propagación hacia las demás plantas. Cuando el girasol comience a marchitarse y veas que sus hojas se tornan amarillas y negras, lo mejor que puedes hacer es cortar ese girasol con mucho cuidado. Sin triturarlo, ya que si cae una hoja en el suelo, esta se convierte en abono e infecta a las nuevas plantas.
El mildiu también es una enfermedad que ataca a los girasoles. Conoce más sobre esto dando click en el link.
Cómo prevenir las enfermedades del girasol
Para prevenir las enfermedades debes prestar atención a cualquier cambio que se produzca tu planta de girasol, así puedes tratarla de inmediato.
La siembra temprana, no excederse en el riego, evitar mojar el follaje, el control de plagas y la rotación de cultivos, ayudarán a que tu planta crezca con vigor y sea más resistente a enfermedades y plagas. Aplica fungicidas naturales a base de leche, ortiga o cola de caballo para prevenir y tratar enfermedades causadas por hongos.
En cuanto a la rotación de cultivos, recuerda que el período de descanso para volver a cultivar girasol en el mismo lugar en el huerto es de un año.