- Reino: Fungi
- Familia:Erysiphaceae
- Género: Erysiphe
¿Qué es el oídio o cenicilla?
La cenicilla del tomate es una enfermedad fúngica que se genera en condiciones de humedad de entre 50 y 75% y a una temperatura que esté cerca a los 25 °C. La cenicilla es generada por hongos de la familia de las erysiphaceae. Algunas características del oídio son:
- Sobrevive en estado latente en los restos vegetales y en la tierra, por lo que eliminar las plantas afectadas no es suficiente para combatirla.
- Sus síntomas son muy parecidos a los del mildiu, por lo que muchas veces es difícil diagnosticarla.
- Puede atacar a plantas de jardín y a árboles y plantas frutales.
Síntomas de la cenicilla en el tomate
La cenicilla u oídio es un hongo que afecta principalmente a las hojas y tallos de las plantas. Los síntomas más comunes de oídio en el jitomate son:
- En un primer momento aparece la clorosis o amarillamiento de las hojas.
- Con el tiempo aparece la mancha de polvo blanco que parece ceniza sobre las hojas.
- Estas manchas blancas van generando necrosis de las hojas, las hojas se van secando mientras avanza la enfermedad.
- Tanto las hojas secas como cloróticas no pueden realizar correctamente la fotosíntesis, por lo que la planta se va debilitando llegando incluso a morir.
- Las plantas que tengan heridas, por ejemplo de poda, pueden ser afectadas por la enfermedad más rápidamente.
Cómo combatir y prevenir la cenicilla del tomate
Es vital que se realice una correcta prevención para evitar la infección. Para la prevención es importante controlar que la luz solar y la humedad que reciben los jitomates sean correctos. Además es importante que los abonos que usemos en la tierra tengan bajo contenido de nitrógeno. Si no logramos prevenir y los tomate se infectan con cenicilla, estos remedios naturales pueden ayudarte a curar tus cultivos:
- Ajo
- Purín de cola de caballo
- Antifúngico de leche
- Bicarbonato de sodio
- Purín de ortiga