- Necesidades de riego del jazmín: frecuente
- Riesgo de exceso de agua: pudrición de raíces
- Riesgo de falta de agua: sequedad de las hojas
Entre los cuidados que tienes que mantener para que el jazmín crezca vigoroso y se desarrolle en plenitud, están los siguientes: la luz solar, la poda, la temperatura y uno de los más importantes: el riego del jazmín.
¿Cómo debe ser el riego del jazmín?
- Frecuente
- Suficiente
Estas dos características te recordarán que debes estar pendiente de comprobar con bastante periodicidad la tierra de la maceta o del jardín en donde está plantado el jazmín.
Para que mantengas un riego apropiado, ten presente lo siguiente.
Recomendaciones:
- Que haya un buen drenaje en el suelo del jardín o en la maceta del jazmín.
- Aumenta el riego a cada 2 o 3 días en verano. En las épocas de más calor se evapora con más rapidez el agua.
- Revisa, tocando la tierra, la humedad en el suelo. Es la forma más práctica de asegurarte si necesita riego.
- Recuerda que el exceso de humedad perjudica las raíces y con el tiempo a todo el jazmín.
- En caso de que tu jazmín sea pequeño, es suficiente regarlo con un rociador.
- Observa tu jazmín. Si detectas hojas secas o marrones, revisa la tierra para saber en primer lugar si se trata de falta de humedad.
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