Melocotonero bonsái: Consejos y cuidados

El melocotonero, además de cultivarse por sus frutos, es un árbol muy apreciado como ornamental. Su floración en primavera es realmente bellísima, ya que se cubre de flores casi por completo. Si te animas a cultivar tu propio melocotonero bonsái, aquí encontrarás consejos muy prácticos.

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La maceta del bonsái debe tener muy buen drenaje
  • Nombre científico: Prunus persica L.
  • Familia: Rosaceae
  • Origen: China, Irán y Afganistán
  • Clima: Templado

Cómo hacer un melocotón bonsái

Además de su floración, ver un melocotonero bonsái con algunos frutos en sus pequeñas ramas es la razón por la que muchas personas han decidido practicar esta técnica milenaria. Con un poco dedicación, paciencia y siguiendo algunos consejos, podrás tener tu propio melocotón bonsái.

Maceta y sustrato

Elige una maceta ancha y baja para cultivar tu melocotonero bonsái. Asegúrate de que tenga muy buen drenaje. Una vez que has elegido la maceta, agrégale un sustrato suelto y con PH neutro. Para los duraznos, la mezcla recomendada es 50% akadama, 25% pomice y 25% roca volcánica.

Datos curiosos

Los japoneses nunca eligen el centro de la maceta para sembrar el árbol bonsái, porque consideran que es el lugar de Dios.

Ubicación

El mejor lugar para el melocotón bonsái es en el exterior, a pleno sol. Los duraznos en maceta son menos resistente a las heladas, por eso es importante que los protejas del frío. Además, durante su época de floración, no tolera las heladas tardías, ya que le hacen perder sus flores.

Riego

Como ocurre con las plantas en maceta, es conveniente vigilar más el riego, sobre todo cuando florece en primavera y durante la etapa de crecimiento de frutos.

Trasplante

Trasplanta tu bonsái una vez al año durante su etapa de crecimiento y cada 2 o 3 años cuando esté más viejo. Hazlo antes de la primavera, y antes de que florezca. En el momento del trasplante también debes podar las raíces más gruesas (no las finitas).

Poda y alambrado del melocotón bonsái

En la poda y alambrado del bonsái radica todo el arte de darle forma a los arbolitos miniatura. Los duraznos quedan muy vistosos si los podas en forma de cascada. Tómate tu tiempo para diseñar la forma del bonsái y y poda todas las ramas que se salgan de ese diseño. Retira también las ramas muy entrecruzadas. Otro tip es que podes las ramas delanteras para dejar libre la cara frontal del bonsái.
El alambrado también se realiza para darle forma a las ramas y guiar su crecimiento en base al diseño. Se realiza con alambre de aluminio o cobre enrollándolo en las rama a las que quieres darle forma.

¿De semilla o de vivero?

Si cultivas el durazno de semilla, podrás controlar desde el principio el ritmo de crecimiento y podarlo de la forma que más te guste. Pero también puedes comprar un duraznero de un año en un vivero y convertirlo en bonsái, como puedes ver en el siguiente video:

Youtube
Texto: Lorena Morales