¿Cómo cuidar la dracaena como planta de interior?

Aunque la dracaena también puede cultivarse en el balcón o como planta de maceta en el jardín, normalmente se consiguen mejores resultados si se cuida durante todo el año en el centro del salón o en otra habitación muy luminosa. Con unos sencillos trucos, tu dracaena también puede conseguir un crecimiento saludable y un tamaño majestuoso a lo largo de los años como planta de interior.

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La dracaena es una planta popular para interiores

La ubicación correcta del dracaena en la habitación

A las dracaenas les gusta generalmente la luz y el calor, pero un lugar demasiado soleado con acumulación de calor en el balcón o directamente detrás del cristal de una ventana puede hacer que las hojas de la dracaena se quemen mucho y se caigan. Las ubicaciones óptimas son a unos dos o tres metros de una ventana, donde tenga la suficiente cantidad de luz, pero no directa.

Datos curiosos

Las subespecies con hojas más rojizas toleran más el sol que las especies de hojas puramente verdes. Además las dracaenas no deben ser colocadas directamente junto a la calefacción ya que no tolera bien los lugares secos y eso podría causar la aparición de plagas en las hojas.

No olvides replantar y abonar la dracaena con regularidad

Las dracaenas plantadas en el jardín pueden abastecerse por sí mismas de nutrientes con más facilidad que las plantas en maceta o en hidroponía. En el caso de las plantas de interior, a veces se olvida la fertilización regular. Sin embargo, los dracaenas lo agradecerán con un crecimiento sano y con flor si se le abona adecuadamente. Además, hay que replantar un dracaena cada dos o tres años y renovar el sustrato de la maceta al mismo tiempo.

Cuidados básicos de la dracaena

Las plantas de interior están constantemente en el campo de visión directo de sus propietarios y, por lo tanto, deben tener un aspecto lo más pulcro posible, sin hojas caídas. Las siguientes medidas de cuidado harán que tu dracaena luzca aún más hermosa:

  • Controles periódicos para detectar posibles infestaciones de plagas.
  • Regar con cuidado y moderación, únicamente cuando el sustrato se ha secado por completo.
  • Abonar el sustrato con regularidad (una vez por semana en verano), puede ser con restos de café.

 

Datos curiosos

La elevada humedad de las zonas naturales subtropicales suele ser difícil de imitar en el interior. Sin embargo, puedes hacer un bien a tus dracaenas rociando regularmente las hojas con agua tibia y poco calcárea.

Si quieres conocer más sobre los cuidados de la dracaena marginata te invitamos a seguir el enlace.

Texto: Tomas Andrés