¿Cómo es el bonsái de bambú?

¿Sabías que existe una especie de bambú que es un pequeño arbusto? Generalmente, cuando hablamos de bambú, nos imaginamos aquel que contiene hojas largas y verdes o largas cañas. Pero en este caso, conoceremos cómo es el bonsái de bambú, también conocido como bambú sagrado (Nandina domestica) y los cuidados necesarios que necesita para mantenerse saludable.

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A este bonsái le gustan los climas cálidos

Características generales del bonsái de bambú

Su nombre científico es Nandina doméstica y es conocido también con el nombre de sagrado o celestial. Como mencionamos es un arbusto que puede llegar a medir hasta casi 2 metros cuando está completamente desarrollado.

Se diferencia de otros por el aspecto que tienen sus hojas, apenas nacen que son de color rosa. A medida que van envejeciendo pasan a ser rojas hasta convertirse en verde y siguen así durante todo el período de crecimiento hasta que mueren y se caen, donde pasan a ser rojas y por último púrpura.

Además, a principios del verano nacen unas flores pequeñas de color blanco, con centro amarillo. Las mismas están agrupadas todas juntas. Es una planta con origen en Asia Oriental, prefiere el calor y el sol.

Ahora bien, si tienes un bonsái de bambú en tu hogar, necesita de algunos cuidados básicos para desarrollarse saludablemente. Uno de los más importantes es el riego, deberás tener en cuenta que la maceta en donde este necesita de agujeros en la superficie para un buen drenaje.

Cuidados del bonsái de bambú

Temperatura

El bonsái de bambú es originario de Asia, por ello para desarrollarse y crecer necesita de un clima cálido. Por ello, si tienes una planta de esta en tu hogar, el sitio perfecto para que esté es en el exterior donde la mayor parte del día le dé el sol.
Esta planta no soporta temperaturas inferiores a los 7 grados. Lo ideal es una temperatura de 20 grados para su desarrollo.

Poda

El bonsái de bambú necesita ser podado para facilitar su crecimiento. El proceso debe ser realizado a finales del invierno. Recuerda que es una planta que crece bastante lento, por ello corta las puntas de los brotes y deja por lo menos 3 hojas nuevas.

Riego

El riego es uno de los cuidados más importantes del bonsai de bambú. La maceta en donde esté plantado debe tener los agujeros adecuados para facilitar un buen drenaje. Si bien es una planta que prefiere el agua, por lo cual se debe regar todos los días, no hay que permitir que la tierra esté con exceso de agua porque las raíces se van a terminar pudriendo.
En el que caso que esté problema ocurra, tendrás que trasplantar la planta y cortar las raíces muertas. Por supuesto que este procedimiento tiene que ser lo más rápido posible, antes de que toda la planta muera.

Trasplante

Se recomienda trasplantar el bonsái de bambú cada dos años por lo menos en primavera. Durante este proceso, las raíces se deben cortar bastante para que no crezcan tanto en el espacio pequeño de la maceta.
¿Por qué cortar las raíces? Esto permite que el bonsái de bambú mantenga su tamaño pequeño y siga creciendo.

Texto: Romina Benito