¿Cómo plantar bambú en maceta?
Como mencionamos en la introducción, los pasos para plantar un bambú en maceta son muy sencillos y aún más lo son los cuidados que son necesarios para qué la planta crezca saludable, pero eso lo aprenderemos más abajo. ¡Toma nota y anímate a hacerlo en tu hogar!
- Coloca en agua los esquejes o rizomas de bambú seleccionado. Esto es necesario para que los mismos se hidraten de la manera correcta, además se lavan.
- Selecciona un tamaño de maceta mediano, es fundamental que las raíces tengan espacio para crecer. Además, debe contener agujeros en la superficie para un correcto drenaje.
- Agrega sustrato de turba en la tierra y mezcla bien. Realiza un hueco en el centro.
- Introduce el bambú en el hueco en la tierra. Rellena con tierra hasta que las raíces queden bien cubiertas.
- Una vez colocado, riega la tierra con una regadera, hasta que quede húmeda (ejecuta la verificación todos los días).
- Coloca la maceta cerca de una ventana si está en el interior del hogar, en cambio, si está en el exterior bajo una cubierta o árbol.
Datos importantes para tener en cuenta a la hora de plantar un bambú en maceta:
- En una misma maceta podrás plantar varios esquejes o ramas del bambú seleccionado.
- El trasplante de una maceta a otra se debe hacer entre los 2 y 5 años del bambú. De este modo, su crecimiento será uniforme, sin que se ponga amarillo.
- En líneas generales, los bambúes son sensibles al calor, por eso cuando se siembran en maceta deben tener siempre la tierra húmeda.
- Si prefieres las macetas de metal para plantar el bambú, es posible, pero la misma debe contener huecos en la superficie para el drenaje y el tipo de bambú seleccionado debe ser resistente.
- El mejor momento para sembrar el bambú es durante la primavera.
¿Cómo cuidar un bambú en maceta?
La planta de bambú en maceta necesita de algunos cuidados básicos para crecer fuerte y sano. Te adelantamos que el cuidado más importante tiene que ver con el riego. A continuación, el detalle de cada uno de los cuidados:
- Clima: el bambú es una planta de zonas cálidas y húmedas, por ello prefiere ese tipo de clima. De hecho, es sensible a los cambios bruscos de temperatura, incluso de las corrientes de viento.
- Riego: durante los meses de verano, el bambú se debe regar con más frecuencia, por lo menos 4 veces a la semana. Controla que la tierra no esté con exceso de humedad porque las raíces se pueden pudrir.
- Fertilizantes: el bambú es una planta que no necesita de fertilizantes para crecer fuerte, de hecho, si le agregas más de lo que puede necesitar se verá perjudicado.
- Lugar: el bambú en maceta lo puedes colocar en el interior del hogar, cerca de una ventana donde entre luz natural, pero no el sol directo. También puede estar en el exterior, pero en ese caso el sitio ideal es debajo de una semisombra, donde el sol no lo puede quemar y lo protege del frío.
Preguntas frecuentes
¿Cómo cuidar una planta de bambú en maceta?
Los cuidados que necesita el bambú son bastante sencillos de realizar, pero el más importante es el riego. Cuando está en una maceta se debe regar en verano 4 días a la semana, luego con menos frecuencia. Controla que las raíces no reciban demasiada agua.
¿Cuánto crece el bambú en maceta?
El crecimiento del bambú depende mucho de la especie seleccionada y también del tamaño que tenga la maceta. Por ejemplo, si plantas una variedad que cuando se desarrolla alcanza una temperatura de 9 metros, en una maceta solo llegara a crecer hasta los 3-4 metros.
¿Qué significa tener un bambú de la suerte en maceta en el hogar?
El bambú de la suerte, según el Feng Shui, es un símbolo de fortuna y además atrae las buenas energías que haya en el hogar. De hecho, es una planta que se suele regalar con frecuencia cuando se quiere desear a la otra persona, riqueza y prosperidad.
Qué pasa cuando el bambú en maceta se pone amarillo?
Existen dos motivos principales por los cuales el bambú en maceta se puede poner amarillo, uno de ellos es el exceso de agua, donde también en casos extremos, el tallo puede morir y el otro motivo es que el sol lo queme. Es por esto que se recomienda que no esté expuesto al mismo.
