¿Qué es el Aloe vera?
El aloe vera o sábila, como le llaman en otros países, es una suculenta de follaje extenso y de bajo mantenimiento que puede cultivarse como planta de exterior e interior. Las hojas de sábila nuevas surgen en el centro de la planta y cuando están completamente desarrolladas, miden unos 50 cm de largo, tienen una pulpa gruesa, son puntiagudas en la parte superior y tienen espinas en los bordes.
Antes del trasplante de Aloe vera
El aloe de interior es también –según la especie– una planta de crecimiento rápido, por lo que hay que tener en cuenta:
- Las necesidades de espacio cada vez mayores. El aloe verdadero necesita una maceta o recipiente más grande cada 2-3 años
- Siempre debe contener una capa de drenaje para evitar que la planta se ahogue y enferme. Riega correctamente.
- El tipo de suelo, los suelos arenosos, secos y bien drenados son especialmente adecuados para el cultivo del Sábila. Una mezcla de tierra estándar para plantas de interior con arena y posiblemente algo de turba o sustrato para cactus o suculentas ya preparado está bien drenada, para que el exceso de agua pueda escurrir.
¿Cuándo y cómo trasplantar?
La sábila puede trasplantarse en cualquier momento, excepto durante la floración. Sin embargo, tiene sentido hacerlo después del letargo invernal. La mejor época es cuando comienza el calor. Si haces un trasplante regular de Aloe vera a una maceta más grande, no es necesario agregar abono, ya que la planta puede absorber suficientes nutrientes de la tierra fresca.
Datos curiosos
Si las hojas de tu sábila adquieren manchas marrones, esto puede deberse a un exceso de riego. Si toda la planta está afectada, tal vez puedas salvarla trasplantándola en tierra fresca y seca y no regar durante las primeras semanas después del trasplante.
Trasplante paso a paso
Ten en cuenta que no se debe regar el aloe vera mucho tiempo antes de trasplantarlo, para que el cepellón pueda aflojarse fácilmente. Una vez que la tierra se haya secado:
- Con cuidado afloja la tierra de alrededor del cepellón y jala la sábila con mucho cuidado
- Coloca el Aloe vera en un recipiente más grande con una capa de drenaje preparada con grava y arena
- Rellena con tierra fresca y coloca la planta trasplantada en un lugar protegido del sol durante unos días